Juan Bravo: «El compromiso de Feijóo es no subir impuestos y bajarlos cuando lo permitan las cuentas»
"Feijóo hará una auditoría general de las cuentas públicas que le deje Sánchez"
"Seguro que encontraremos cosas ocultas en los cajones como dejó Zapatero"
"Feijóo no tendrá 22 ministerios. Reduciremos el gasto político superfluo"
«El compromiso es que siempre que las cuentas públicas y la situación económica lo permitan la prioridad será bajar impuestos». En una entrevista en Hoy Responde de OKDIARIO, Juan Bravo, vicesecretario de Economía del PP, aclara cuál es la promesa en materia impositiva de Alberto Núñez Feijóo si llega a Moncloa: «Lo que le puedo asegurar es que no subiremos impuestos y los bajaremos tan pronto lo permitan las cuentas públicas».
«Para hacer esto empezaremos por reducir el gasto público superfluo», señala. «Feijóo no tendrá 22 ministerios. Se lo puedo asegurar». «Haremos», añade, «reformas contra las trabas administrativas y burocráticas, agilizaremos las inversiones y pondremos en marcha los fondos europeos».
Auditoría general
Juan Bravo adelanta también que «Feijóo hará una auditoría general de las cuentas públicas que le deje Sánchez; la que no hizo Rajoy con Zapatero». Dice Juan Bravo que, de saber el monumental agujero que Zapatero dejó a Rajoy, las cosas hubieran sido peor para España porque pendía la amenaza de la intervención: «Rajoy no hizo la auditoría, pero pensemos que lo que hubiera contado hubiera sido tan duro que la caída hubiera sido mayor».
Feijóo se compromete, pues, a explicar a los españoles la situación que le dejen Sánchez, Calviño, Yolanda Díaz y sus ministros de Podemos: «Nada más llegar a Moncloa, el presidente Feijóo hará una auditoría y le contará a los españoles la realidad de las cuentas, que no son las del gobierno o la administración. Son sus cuentas; las cuentas de los españoles. Ese dinero que hay o se debe es de los españoles».
Cajones ocultos
Tras la experiencia de Zapatero con Rajoy, Juan Bravo se muestra convencido de que «sin duda, nos encontraremos cosas ocultas en los cajones, por desgracia, porque con este gobierno no hay plan y no hay gestión como demuestran los presupuestos de hoy mismo». El responsable económico del PP es consciente del marrón que recibirán de Sánchez porque ya es perfectamente detectable: «Seguro que habrá cosas ocultas como le ocurrió a Rajoy con Zapatero. Pero, sólo con lo que conocemos, fíjese: tenemos 320.000 millones de deuda más en comparación con junio de 2018; ponga la subida de tipos de interés que puede producirse y la reducción de capacidad de gasto derivada de ella; ponga que los fondos europeos next generation, si no cumplimos objetivos, hay que devolverlos con lo que se habrá hecho el gasto pero no tendremos el dinero porque habrá que devolverlos. Y, luego, todos los anuncios de gasto que se hacen y no tienen contrapartida detrás. Es decir, el Gobierno se ha comprometido a hacer unos pagos y ya vendrá otro y los pagará».
Juan Bravo pone un claro ejemplo en el impuesto a la banca, que, con los antecedentes de recursos judiciales ganados por la banca a la administración, es más que probable que la situación que describe se produzca: «Imaginen si el impuesto a la banca al final es inconstitucional en unos años. El gobierno de Sánchez lo habrá cobrado, se lo habrá gastado y el que venga detrás tendrá que devolverlo».
El recuerdo de Rajoy
El PP sabe que ha calado la idea de que Rajoy prometió bajar impuestos y empezó subiéndolos. Juan Bravo lo reconoce, pero le pone cifras a aquella decisión inicial: «Rajoy se encontró mucho más que un déficit de 27.000 millones que le ocultó Zapatero. Se encontró -oculta- una caída de la recaudación de 70.000 millones de euros y 90.000 millones de euros de facturas sin pagar del plan de pago a proveedores y todas las derivadas, deudas, sobrecostes en los tipos de interés».
Juan Bravo recuerda que el gobierno Rajoy se encontró entre la espada y la pared: «Entiendo que ha calado la idea de que Rajoy prometió bajar impuestos y la primera medida fue subirlos, pero hay que entender que la otra opción era la intervención de Europa y eso hubiera supuesto que a los pensionistas les hubieran bajado la pensión un 30% de un día para otro».
Juan Bravo destaca que el balance global de Rajoy es que cumplió con su promesa: «Rajoy tuvo que poner primero orden en las cuentas y luego, si coges la foto de 2012 a 2018, los impuestos bajaron más de lo que habían crecido al inicio. Es decir, la situación de los impuestos fue mejor que la que había en 2011».